Lo malo y lo bueno, el infortunio y la suerte, la pena y la alegría, están tan cerca lo uno de lo otro. Minuto 89, 0-1 perdiendo, no sólo tres puntos, sino, posiblemente diciendo adiós a un sueño. Minuto 93, 2-1, de la resignación al extásis en apenas cuatro minutos. Pero así es este equipo, como las pilas duracell, duran y duran, y pelean, y lo siguen hasta que lo con...siguen. Mal se ponían las cosas antes del partido, a las bajas ya conocidas se unía la de Nacho Cabet que, en el último suspiro del entrenamiento del viernes, también se lesionaba. Pero como no era bastante, también Güi llegó al encuentro con un fuerte dolor en la espalda que hizo dudar de su participación, finalmente lo hizo, con dolores, eso sí. El partido resultó igualado, con el cero a cero, tuvimos varias ocasiones muy claras, en especial una en la que Juanma Barba, solo bajo puerta, manda al larguero. Pero fueron los leperos quienes se adelantaron. A partir de ahí, se cerraron atrás mucho más y nos costaba crear ocasiones claras, aunque el dominio era nuestro. A la contra, tuvieron un par de ocasiones muy claras, pero ahí estaba nuestro Mateo para, con su paradas, mantener las opciones hasta el final. Y así fue como en el 89, Jaime marca por la escuadra, y en el 93 Juanma marca el 2-1. ¿Injusto?. Recordemos que, precisamente en Lepe, nos empataron con el tiempo cumplido en un clamoroso error arbitral. Mientras hay vida hay esperanza, y esta gente, seguro, pelearan hasta el último suspiro por su sueño.
Hace 8 horas
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